Las tendencias alimentarias, en dietas y salud van cambiando con cada año que pasa, y no todas tienen una base científica en la que respaldarse. En este caso, nos centramos en la moda de beber agua salada.
Se ha extendido que beber agua salada es un remedio que ayuda a purificar y limpiar nuestros organismo de impurezas, además de aportar diversos beneficios para la salud como ayudar en la limpieza de la piel, la calidad del sueño y aportarnos energía.
Pero, un alto porcentaje de estudios y expertos indican que se trata de un falso remedio, además de ser perjudicial para la salud.
Ingerir agua con sal trae consigo múltiples consecuencias perjudiciales para nuestro cuerpo. El agua salada nos provoca deshidratación, puesto que nuestro organismo elimina más agua de la que consume. Esto se debe a que el riñón no puede producir orina con una concentración de sales superior a un 2 %. Asimismo, la deshidratación también provoca efectos secundarios en nuestro organismo como náuseas, vómito, diarrea y fiebre, entre otros síntomas.
Y esto solo si hablamos de agua a la que le añadimos sal. Dado que en caso de ingerir agua de mar, esta no ha pasado por ningún filtro previo ni proceso de desinfección o potabilización. Por lo que puede contener microorganismos nocivos para nuestra salud.
Aunque, esto no supone un riesgo si ingieres agua de mar por accidente mientras te estás dando un baño.
Además, como destaca la OMS superar la ingesta máxima de sal recomendada ( >2 gramos al día) es malo para nuestro cuerpo. Excedernos tomando sal puede provocar aumento de hipertensión arterial, aumento del riesgo de cardiopatía y accidente cerebrovascular.
Es por esto, que antes de apuntarte y seguir una moda, es necesario estar informado. Evita beber agua con sal y asegúrate de hidratarte correctamente.